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No Tocar

  • Foto del escritor: Numby.
    Numby.
  • 19 nov 2019
  • 13 Min. de lectura

“Te apuesto todo un mes de lo que quieras de la tienda a que no puedes pasar una semana entera sin tocar a Minho.”


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Tumblr Personal: thatkpopkidmarklee

Tumblr de Escritor: vminni

Categoría: Oneshot

Género: Slice of Life AU

Original: No Touching







Nota del Autor : "Siento que siempre escribo a Seungmin como ... no realmente malo, pero definitivamente no es el más bueno, así que traté de hacerlo más suave en esta historia, lo siento Seungminnie, por usarte siempre para generar conflicto." - Iknowyouknowleeknow


*Esta es una historia traducida del inglés al español con autorización del autor. Todos los derechos de la pieza pertenecen a su autor.

“Te apuesto todo un mes de lo que quieras de la tienda a que no puedes pasar una semana entera sin tocar a Minho.”


Jisung resopló burlonamente, quitándose el flequillo de la frente mientras veía a Seungmin, “si tanto quieres comprarme comida, podrías hábermelo dicho sin

necesidad de una estúpida apuesta.”


“Sí, sí”, sonrió Seungmin maliciosamente. “¿Aceptas o qué?”


“Oh, claro que acepto,” Jisung extendió su mano hacia Seungmin y éste la tomó. “No puedo esperar por un mes entero de ramen gratis.”


“Seguro que eres arrogante para alguien que parece no poder caminar por la calle sin tomarle la mano a Minho.”


Jisung se encogió de hombros y se dejó caer de nuevo en su cama, mirando hacia el techo. "Él es encimosos, yo soy encimoso, funciona. Pero no tenemos que hacerlo. No es la gran cosa."


"No creo que dures ni dos días", Seungmin se acomodó en su propia cama frente a Jisung. "Tres días, máximo".


"¿Puedo decirle?" Jisung se sentó, sus dedos ansiando su teléfono. "¿O es algo secreto?”


“Dile lo que quieras, no importa. Vas a perder de todas formas.”


Jisung resopló, iniciando una video llamada con Minho mientras Seungmin rodaba los ojos.


“Hey,” Minho estaba en el estudio de baile, apoyado contra la pared de espejo mientras se quitaba el pelo sudoroso de la cara. “¿Qué pasa?”


“Seungmin me apostó a que no podría pasar una semana sin tocarte,” Jisung rodó en la cama sobre su estómago, colocando el celular en la almohada. No era el ángulo más halagador, pero no importaba. Minho era su mejor amigo, y nada más, a pesar de lo que sus otros amigos querían creer. “Sólo para que lo sepas.”


“¿Y qué obtienes si ganas?”


“Me comprará comida de la tienda por un mes”.

“Quiero la mitad de lo que sea que te compre,” Minho limpió el sudor de su frente con la manga de su playera. “Ya que estoy involucrado”.


“Trato hecho”, Jisung levantó su dedo meñique hacia la cámara, sonriendo mientras Minho hacía lo mismo. “Vamos a comer muy bien.”



A la mañana siguiente, Minho se encontró con Jisung y Seungmin fuera del edificio de su dormitorio, como lo hacía todos los días, listo para caminar a clase. Jisung sonrió emocionado cuando lo vio, y su mano se extendió automáticamente para tomar la de Minho.


Minho la quitó antes de que Jisung pudiera tocarlo. Jisung frunció el ceño, herido por la reacción de Minho.


Minho rodó los ojos ante la expresión de Jisung, “¿Ya te olvidaste de la apuesta?”


“Oh, mierda, se me olvidó”. Jisung rió, el alivio inundó su cuerpo. Reprimió ese sentimiento de dolor, no queriendo detenerse a pensar en lo que significaba. Minho era su mejor amigo, eso era todo, y no quería que su mejor amigo se sintiera incómodo con él. Por eso se sintió aliviado. Fue una reacción totalmente normal.


Jisung se metió las manos en los bolsillos para no volver a sentirse tentado y asintió con la cabeza para que Seungmin caminara en medio de ellos. No podía confiar en sí mismo para no rozar sus hombros con los de Minho, o golpearlo juguetonamente con el codo, o despeinar el cabello ligeramente húmedo de Minho. Guardó silencio mientras Minho y Seungmin conversaban alegremente, discutiendo sobre un programa de televisión que ambos estaban viendo y del que Jisung nunca había escuchado. Estaba perdido en sus propios pensamientos, muy consciente de repente, de la frecuencia con la que tocaba a Minho.


Iba a ser una semana muy larga.


Cuando llegó la hora del almuerzo, Jisung sintió que había envejecido diez años. No había sido tocado en absoluto, fue duro. Más duro de lo que había imaginado.


"¡Félix!" Prácticamente se derritió cuando vio a su amigo parado afuera de la cafetería, arrojándose a sus brazos. Félix se movió hacia atrás ante el contacto inesperado, pero sus brazos se levantaron para rodear a Jisung de todos modos.


"Oh, gracias a Dios", Jisung presionó su rostro contra el cuello del chico confundido, acariciando la mejilla en el calor. "¡No me han tocado en todo el día!"


"¿No es el trabajo de Minho tocarte?" Félix trató de desenredarse de las manos de Jisung, pero Jisung se aferró a él con más fuerza. “¿Están peleados? ¿Cortaron?


"No estamos saliendo", resopló Jisung. Finalmente se liberó del abrazo, pero enredó sus dedos en la mano pequeña de Félix y dejó caer la cabeza sobre el hombro de su amigo. Felix le acarició el cabello con torpeza y Jisung pudo sentir que miraba a su alrededor, probablemente esperando que Minho apareciera y lo salvara del apego de Jisung. "Seungmin apostó que no podría pasar una semana entera sin tocar a Minho. Así que lo estoy reemplazando contigo ".


“No estoy lo suficientemente cerca como para satisfacer tu necesidad de afecto”.


"Bueno, entonces tenemos que aprovechar el poco tiempo que tenemos". Jisung levantó sus dedos entrelazados y los miró, contemplando. La mano de Félix era un poquito más pequeña que la de Minho. Físicamente no se sentía muy diferente a tomar la mano de Minho, aunque la de Félix era un poco más rasposa. Emocionalmente, bueno, Jisung empujó ese pensamiento de nuevo. No le gustaba Minho de esa forma. Eran amigos.


Como si los pensamientos de Jisung lo hubieran invocado, Minho apareció de repente, riéndose con Hyunjin mientras se dirigían hacia donde estaban los dos. El rostro de Jisung se iluminó con una sonrisa, una que Minho reflejó cuando los notó, y comenzó a agitar la mano que había enredado con la de Félix.


La mano libre de Jisung estaba ansiosa por tomar la de Minho. Seungmin no estaba cerca. No haría daño si no lo sabía.


“Estoy en modo de vigilancia”, Hyunjin miró la mano que se levantaba hacia Minho. "Mi lealtad está con Seungmin".


La mano de Jisung cayó sin fuerzas a su costado cuando Minho enganchó su brazo con el de Hyunjin arrastrándolo a la cafetería. Abatido, Jisung los siguió, su otra mano aún envuelta a salvo con la de Félix.


Felix le dio palmaditas en el brazo, la compasión coloreó su tono, “buena suerte amigo. Va a ser difícil”.



“No puedes pasar.”


Minho hizo un puchero, ya en el proceso de abrir la puerta del dormitorio de Jisung, "¿Por qué no?"


"¡Ya sabes por qué!" Jisung casi extendió la mano para empujar suavemente a Minho, pero se contuvo en el último segundo. “Necesitas irte por el resto de la semana. Salir con Woojin o algo así. Estar en cualquier lugar menos cerca de mí. No puedo tenerte cerca. La comida de la tienda es demasiado importante ".


Minho arrugó la nariz e inclinó la cabeza, mirando a Jisung por unos segundos. Luego se encogió de hombros y su mano se apartó de la perilla de la puerta. Nos vemos el próximo lunes."


Le dolía, por alguna razón, verlo alejarse, sus hombros ligeramente encorvados y sus manos agarrando las correas de su mochila. Jisung pensó en llamarlo, en disculparse, aunque no estaba completamente seguro del por qué. Todo lo que sabía era que odiaba la forma en que la luz en los ojos de Minho se había atenuado ante la implicación de que la comida era más importante que él.


Era la hora del almuerzo del martes y Minho no se había presentado. Tampoco había estado allí para caminar a clase esa mañana, y aunque Jisung sabía que había dicho que no podía tener a Minho cerca, no creía que Minho realmente se alejara. Sabía que era estúpido, sabía que él había hecho esto, sabía que Minho le había dicho que lo vería la próxima semana, pero aun así se le retorció un poco el corazón mientras hurgaba en su almuerzo.


La mano que no sostenía sus palillos descansaba sobre el muslo de Félix y ocasionalmente pasaba el pulgar sobre la piel que se asomaba por el borde de sus shorts. Félix no pareció darse cuenta y Jisung se preguntó si el estremecimiento que siempre se abría paso a través de su mejor amigo cuando lo hacía era puramente cosa de Minho.


“Estás muy callado hoy”, señaló Hyunjin “¿Estás bien?”


“Estoy bien”, murmuró Jisung, apartando su almuerzo intacto. “Solo cansado”.


Felix y Hyunjin intercambiaron una mirada. Jisung sabía exactamente lo que significaba esa mirada.


"Por enésima vez, Minho y yo no estamos saliendo. Y no, no estamos peleados, y no, no estoy triste porque él no está aquí ".



Era miércoles y Félix acababa de retirar su mano de la de Jisung por quinta vez en la última hora para limpiarse el pantalón.


"Lo siento", Felix hizo una mueca cuando vio a Jisung mirando, volviendo a juntar sus dedos debajo de la mesa de la biblioteca. “Tienes manos sudorosas”.


Jisung estaba confundido, “¿Enserio? Minho nunca ha dicho nada sobre mis manos."


"Bueno, sí", Felix golpeó su bolígrafo contra su libro de texto, "No diría nada si estuviera agarrando la mano de Changbin y su mano estuviera sudorosa".


"Eso es porque estás enamorado de Changbin", señaló Jisung. "Simplemente estarías feliz de estar sosteniendo su ma..."


Jisung dejó de hablar, no le gustaba la sonrisa comprensiva en la cara de Félix. Desenredó sus dedos y colocó sus manos en su regazo, mordiendo su labio inferior.

"Minho no está enamorado de mí".


Lo dijo de nuevo, esta vez más suave, más por sí mismo que por cualquier otra cosa: "Minho no está enamorado de mí".


"¿Puedo dormir en tu cama esta noche?"


Seungmin parpadeó, su mano se congeló donde estaba enrollada en el borde de su manta, "¿Conmigo?"


Jisung asintió. Seungmin dudó, mirando entre su pequeña cama y su amigo. Jisung no estaba seguro de si fue la expresión de su rostro, o la forma en que estaba apretando su oso de peluche con demasiada fuerza, o el ligero temblor en su labio inferior, pero Seungmin retiró las sábanas y se deslizó, haciendo un gesto para que Jisung se uniera a él.


Jisung se subió en silencio, apoyándose contra el costado de Seungmin y descansando su cabeza sobre el pecho de su amigo. Seungmin parecía inseguro sobre cómo actuar, finalmente deslizó su brazo alrededor del hombro de Jisung y le dio unas palmaditas incómodas.


"Felix cree que Minho está enamorado de mí", finalmente susurró Jisung, con la voz atrapada en la tranquila oscuridad de la habitación del dormitorio. "B-pero eso es una locura, ¿verdad? No lo está. Es mi amigo."


"Yo soy tu amigo", la voz de Seungmin era suave, como si estuviera preocupado por romper a Jisung. “Hyunjin es tu amigo. Felix es tu amigo.


"Lo sé", Jisung movió su osito de peluche en su agarre, aflojando un brazo para poder envolverlo alrededor de la cintura de Seungmin.


“Piensa en la forma en que actuamos contigo. Y la forma en que actúas con nosotros. Es diferente a ti y a Minho ".


"A los dos nos gusta el contacto físico, ¿y qué? No significa nada ". Jisung se retorció un poco, tratando de sentirse cómodo. Seungmin era más alto que Minho y su cuerpo era un poco más suave, lo cual no estaba mal, pero simplemente no se sentía bien. Tampoco jugaba con el cabello de Jisung como Minho siempre lo hacía cuando se acurrucaban y se preguntó si podría sacar a relucir todas las cosas que estaban mal sin probar el punto de Seungmin.


"Es algo más que el solo hecho de que ustedes sean afectuosos, Sung. Es la forma en que se miran el uno al otro y la forma en que te iluminas cuando él está cerca y la forma en que siempre estás hablando de él cuando no está cerca, esperando por la próxima vez que lo veas. Está bien admitir que tienes sentimientos por él. Claramente él siente lo mismo ".


Jisung no dijo nada.


“Una vez pasaste un mes entero sin ver a Hyunjin. ¡Un mes! Y estabas bien. ¿Has estado sin Minho por cuánto, dos días? Dos días y estás claramente triste por eso ".


“No estoy triste.”


"Nunca antes has pedido compartir la cama conmigo, Jisung. Obviamente algo está mal ".


“Solo extraño acurrucarme, ¿de acuerdo? ¿Es un crimen? ”Jisung pudo sentir la presión de las lágrimas y cerró los ojos, esperando que ninguno se filtre y manche la camisa de Seungmin. La verdad era que extrañaba que Minho lo tocara, pero no podía admitir eso. No podía decirlo en voz alta y hacerlo realidad, hacer que todo lo que sus amigos habían implicado fuera cierto.


Porque una vez que fuese real, una vez que estuviese fuera en el mundo, esto podría lastimarlo.


Sus sentimientos podrían lastimarlo.


Minho podría lastimarlo.


Era jueves por la tarde y Woojin estaba esperando a Jisung fuera de su clase, lo cual era extraño. Woojin era amigo de Minho, no de Jisung. Nunca habían pasado tiempo juntos sin Minho.


Woojin no perdió el tiempo, saludando a Jisung en el momento en que lo vio, "Oye, ¿qué pasa contigo y Minho?"


Jisung enganchó su mochila más alto en su espalda, "Nada".


"Mentira".


"¿Por qué no le preguntas a Minho entonces?" Jisung sabía que estaba siendo grosero, pero no pudo evitar el tono amargo de su tono. Todo esto fue tan estúpido. Se suponía que era una apuesta tonta con Seungmin. No se suponía que destrozaría todo su mundo. "Eres su amigo, no el mío".


“Dijo que tenías una apuesta con Seungmin. Que no podías tocarlo durante una semana. Y que no lo querías cerca por eso ".


Jisung envolvió sus manos alrededor de las correas de su mochila y asintió, "Si ya lo sabes, ¿por qué me preguntas al respecto?"


"Solo quería saber si tu versión de la historia era la misma que la suya", Woojin metió las manos en los bolsillos y se balanceó sobre los talones. "Está muy triste".


"¿Está triste?"


Woojin rodó los ojos. Por supuesto que está triste. La persona que más le importa no lo quiere cerca ".


"Es solo por la apuesta", dijo Jisung suavemente, con los ojos en el suelo. "No porque no lo quiera cerca".


"Él lo sabe", Woojin suspiró ligeramente y se pasó una mano por su oscuro cabello. "Pero todavía está herido. Supongo que pensó que podrías ganar la apuesta y aún así pasar el rato con él como siempre. No creo que esperaba que se le prohibiera pasar tiempo contigo ".


"¡Es solo por una semana! ¡No es la gran cosa! ”Jisung estaba perdiendo el control y su voz crecía cada vez más con cada palabra que decía. "¡Está exagerando!"


"Él te adora, Jisung", la mirada de Woojin atravesó su corazón. "Y tú lo lastimaste".



"¡Esto es tan estúpido!" Jisung estaba en la cama de Félix, con la cabeza apoyada en el regazo de su amigo. Felix estaba pasando sus dedos por el grueso cabello de Jisung, escuchando mientras él gritaba. "Es solo una apuesta tonta. Minho sabe sobre la apuesta. Él sabe que tendré la tentación de tocarlo si está cerca. ¿Por qué está actuando como si fuera algo que no es? "


"No puedes decidir qué lo hace sentir mal y qué no", la voz de Félix era suave. "¿Cómo te sentirías si te hiciera lo mismo?"


“Lo entendería,” respondió Jisung rápidamente.


"Piénsalo, Sung," Felix tarareó ligeramente. “Honestamente, solo piénsalo por unos minutos. Que te digan que eres menos importante que una tonta apuesta".


"Eso no es ... ¡No quise decir eso! ¡Él sabe que no quise decir eso! "


"¿Lo sabe?"


Era viernes y Jisung caminaba por el pasillo afuera del departamento de Minho. Le había enviado un mensaje de texto diciendo que iba a ir, pero no había recibido respuesta al mensaje o al toquido en la puerta.


Era posible que no estuviera en casa, que estuviera en la de Woojin o trabajando en el estudio, pero los viernes por la noche normalmente eran de quedarse en casa en sus noches de pijamada.


Jisung estaba caminando hacia la puerta para tocar nuevamente cuando el elevador sonó y alguien salió. Incluso con la capucha puesta y su cara hacia abajo, Jisung sabía de quién se trataba.


“¡Minho!”


Su mirada se levantó, aterrizando en Jisung, y por primera vez, que Jisung pudiera recordar, una sonrisa no se extendió por la cara de su mejor amigo al verlo.


"¿Qué estás haciendo aquí?" Minho no hizo ningún movimiento para acercarse, quedándose el elevador mientras miraba a Jisung.


"Vine a verte". Jisung arrastró los pies un poco y respiró hondo, "lo siento mucho".


Minho tomó una decisión, sacó las llaves del bolsillo y se acercó. Abrió la puerta de su departamento y entró, manteniéndola entreabierta para que Jisung pudiera seguirlo.


"No quise hacerte sentir que eras menos importante que la apuesta o la comida o lo que sea. ¿Lo sabes, verdad? Sabes que eres mi mejor amigo ".


"Estoy cansado de ser tu mejor amigo".


El corazón de Jisung se hizo añicos. Era vergonzoso lo rápido que sus ojos comenzaron a gotear, se los rozó con la manga de su sudadera mientras retrocedía hacia la puerta, "Oh. Disculpa por molestarte. Ya me voy."


"No, Sungie, eso no es ..." Minho extendió la mano hacia él, deteniéndose cuando sus dedos estaban a pocos centímetros de la muñeca de Jisung. Su mano tembló por un segundo antes de dejarla caer a su lado. "Eso no es lo que quise decir."


Jisung se abrazó a sí mismo, tratando de mantener sus emociones, cuando todo lo que realmente quería era ser sostenido por el chico frente a él. Ya no estaba en negación. Tenía sentimientos por Minho. Siempre los había tenido.


"Me dolió verte con Felix", Minho no pudo mirar a Jisung a los ojos. “Creo que hice un buen trabajo al esconderlo durante el almuerzo ese día, pero me estaba matando. Al verte tomado su mano como si nada. Como si tomarse de las manos fuera algo que se podría hacer con cualquiera. Me hizo sentir tan poco importante. Tan reemplazable. Y luego, cuando me dijiste que no me querías cerca…" las manos de Minho se hicieron puño a su lado, "…no lo sé. Sabía que lo estabas haciendo porque querías ganar la apuesta, pero aún así dolía. Realmente, realmente dolía ".


Minho echó la cabeza hacia atrás, parpadeando rápidamente, pero no antes de que Jisung viera unas lágrimas rodar por sus mejillas, "Y todo el tiempo seguía pensando en cómo eres, encimoso, cariñoso y pegajoso, y en cómo no había forma de que te contuvieras solo porque yo no estaba cerca. Sabía que serías cariñoso con alguien más, con todos los demás, y eso, dios, eso me rompió, Sungie. Porque yo solo soy así contigo. Solo quiero tocarte a ti. Pero sabía que tu no tendrías ningún problema para reemplazarme.”


"No puedo tocar a nadie más sin que mi cerebro señale todas las formas en que son diferentes a ti". Todo se sentía mal, ” Jisung se acercó, con algunas lágrimas saliendo de sus propios ojos. “Lo juro, Minho. Cada vez que tocaba a alguien, en todo lo que podía pensar era en ti. En cuán mejor se sentía cuando era tu mano en la mía.”


Minho lo miraba fijamente, con la esperanza comenzando a iluminar su rostro mientras Jisung se acercaba aún más.


"Yo, um, tampoco quiero ser tu mejor amigo".


Ahí estaba la sonrisa que Jisung amaba tanto. Se paró de puntillas, listo para besarla en la cara de Minho.


"Espera", Minho lo detuvo, retrocediendo con las manos en alto. "Perderás la apuesta".


"No me importa", Jisung hizo un puchero. Sus ojos estaban rojos y su nariz goteaba y sabía que se veía ridículo, pero no quería retrasar este momento por más tiempo. "Quiero besarte."


"Puedes besarme después, cuando estemos comiendo el ramen que nos va a comprar Seungmin".


Jisung gimió, frotándose la cara con la manga, "¿Es en serio? ¿Ahora te importa la apuesta? "


"Pues, sí", había una curva tímida en la sonrisa de Minho, "Te gusto. Ahora sé que te gusto. Puedo lidiar con no tocarte por unos días más.


"Pues yo no puedo", se quejó Jisung, alzando sus manos hacia Minho. "Vuelve."


"Nop", Minho sacudió la cabeza. "Quiero bocadillos gratis".


Había tres bolsas de plástico llenas de comida de la tienda distribuidas en la cama de Jisung, pero a él no le importaba eso. Lo único que le importaba era Minho, en cuyo regazo estaba sentado a horcajadas. Sus manos estaban en el cabello del mayor y su lengua en su boca, y besarse con él era tan agradable que Jisung casi podía ignorar a Seungmin que estaba haciendo sonidos de asco en el fondo.


"Dios mío, ayuda", Seungmin le arrojó una almohada que le dio en la cabeza y Jisung se apartó de la boca de Minho por un segundo, volviéndose para mirarlo. "Váyanse a besar a otro lugar".


"No pudimos tocarnos durante una semana gracias a ti. Si crees que estamos siendo excesivos es culpa tuya".


Las manos de Minho se colaron debajo de la camisa de Jisung, quien rió ante la sensación, inclinándose para darle a su novio otro beso largo y tendido mientras los dedos de Minho le recorrían la espalda.


Seungmin se cubrió los ojos gritando.


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