top of page
  • Black Facebook Icon
  • Black Instagram Icon

Entre Más Cambian las Cosas (Más Permanecen de la Misma Forma).

  • Foto del escritor: Numby.
    Numby.
  • 17 jun 2019
  • 10 Min. de lectura
“¿Vas a venir a visitarnos éste fin de semana, verdad?” La barbilla de Jisung se encontraba recargada en la cabeza de su peluche de cerdito favorito, sus ojos llenos de una esperanza tan palpable que Minho podía sentirla a través de la pantalla.
“Sí, lo haré,” Minho abrazó su propio peluche de cerdito, apretándolo contra su pecho con un brazo mientras ajustaba la computadora que tenía balanceada sobre sus piernas. “No puedo esperar por verlos a ti, a Binnie y a Seungmin.·
“Pero más que nada te emociona verme a mi, verdad?” Jisung parpadeo coquetamente y Minho no pudo evitar reír ante el flirteo de su amigo, porque sabía que eso era lo que se esperaba de él, además del revoloteo en su pecho.
“Claro, sobre todo emocionado de verte a ti.”


ree

ree

Tumblr Personal: thatkpopkidmarklee

Tumblr de Escritor: vminni

Categoría: AU / Universo Alterno

Género: Slice of Life


Nota del Autor:

Esto nació de mi tristeza por los dientes de Jisung, aun que no es de mi incumbencia y él se ve muy feliz, pero tenía que escribir sobre esto, así que aquí esta tirada emocional.


*Esta es una historia traducida del inglés al español con autorización del autor. Todos los derechos de la pieza pertenecen a su autor.


“¿Vas a regresar a casa éste fin de semana, verdad?” La barbilla de Jisung se encontraba recargada en la cabeza de su peluche de cerdito favorito, sus ojos llenos de una esperanza tan palpable que Minho podía sentirla a través de la pantalla.


“Sí, lo haré,” Minho abrazó su propio peluche de cerdito, apretándolo contra su pecho con un brazo mientras ajustaba la computadora que tenía balanceada sobre sus piernas. “No puedo esperar por verlos a ti, a Binnie y a Seungmin."


“Pero más que nada te emociona verme a mi, verdad?” Jisung parpadeo coquetamente y Minho no pudo evitar reír ante el flirteo de su amigo, porque sabía que eso era lo que se esperaba de él, además del revoloteo en su pecho.


“Claro, sobre todo emocionado de verte a ti.”


“Más te vale. No te he visto en 6 meses,” Se quejó Jisung, la sabana sobre sus hombros se resbaló por un momento. Se la volvió a colocar encima, pero no antes de que Minho pudiera alcanzar a ver una poción de su piel.


Minho sintió el palpitar de su corazón ante la vista y esperó que su añoranza no fuera tan obvia en su expresión. Había pasado años haciendo lo posible por ocultar que sus sentimientos hacia Jisung eran mucho más que simplemente platónicos, y no iba a revelar ese secreto ahora.


La voz de Jisung lo trajo de vuelta a la realidad, “¿A qué hora llegas?”


“Um,” Minho buscó en su cama hasta que encontró su teléfono para ver los detalles de su vuelo, “Viernes en la noche, como a las 7.”


“Ahí voy a estar,” Prometió Jisung. “Con un cartón con tu nombre y todo.”


Minho rió de nuevo, y después le dirigió una sonrisa a Jisung, “Ya duérmete tonto.”


“¿Duermes conmigo?” Jisung acomodó su laptop, colocándola en la silla al lado de su cama, que Minho sabía estaba precisamente para ese propósito. No había esperado a escuchar la respuesta de Minho, solo se acostó y comenzó a moverse hasta que estuvo cómodo. El ángulo de la cámara mostraba un poco más de piel descubierta antes de que Jisung colocara la sábana sobre su cuerpo, tapando hasta sus cuello, finalmente listo para dormir. Sus ojos soñolientos parpadeaban lentamente frente a la cámara, su cabello oscuro formando un halo sobre el blando de su almohada, y Minho podía sentir su propio corazón intentando salir de su pecho.


En un intento por distraerse, se levantó para acomodar la silla de su escritorio y ponerla al lado de su cama. Minho puso su computadora en ésta y se recostó también, acomodando el ángulo para igualar el de Jisung.


El silencio invadió ambos cuartos, Minho dejó que su respiración se calmara, pero no se atrevió a cerrar los ojos. Aun no, no cuando Jisung seguía observándolo, con la pesadez del sueño, pero con los ojos aun abiertos, aun viéndolo. Minho siempre se aseguraba de que Jisung durmiera primero, tan solo para asegurarse que el menor estaba durmiendo realmente, porque sabía que Jisung tenía problemas con eso a veces. El hecho de que además tenía la oportunidad de ver el hermoso y pacífico rostro de Jisung, era un plus.

Normalmente ninguno de los dos hablaba durante ésta parte de las llamadas, pero repentinamente Jisung rompió el silencio con un susurro vagamente audible, “Desearía que no te hubieras ido nunca.”


Minho abrió la boca, pero antes de poder responder, Jisung comenzó a hablar de nuevo, aun en voz tenue.


“Sé que es egoísta pensar así, sé que la academia en la que estás es la mejor en danza en el país, y que es lo que querías, sé que no tengo ningún derecho, pero… Quisiera que estuvieras aquí.” Sus ojos estaban cerrados ahora, mientras abrazaba el peluche que Minho le había regalado, con tanta fuerza que parecía que iba a estallar. “Quiero dormir a tu lado de verdad, no solamente a través de la pantalla.”


Minho se quedó en silencio, una ola de emociones impidiéndole cualquier pensamiento que no fuese la posibilidad de que Jisung sintiera lo mismo que él, y no fue hasta que los ojos brillante del otro se abrieron de nuevo, que Minho habló.


“El viernes,” prometió, en voz baja y entre quebrada. “Podemos dormir todo el fin de semana si eso es lo que quieres.” Encontró la mirada de Jisung y la vulnerabilidad que vio ahí logró sacarle una verdad, “Lo que sea que quieras, solo me importas tú. Solo quiero estar contigo.”


“Te quiero,” murmuró Jisung, el sueño apoderándose de su voz y pintando de suavidad sus facciones.


No era la primera vez que se lo decían el uno al otro, pero se sentía diferente de alguna forma, más vulnerable, más real. O tal vez solo se trataba de los deseos desesperados de Minho.


Cualquiera que fuese el caso, lo dijo de vuelta, su corazón derramándose entre sus palabras, “También te quiero mucho.”



Jisung mantuvo su promesa y Minho se soltó a reír cuando lo vio sosteniendo sobre su cabeza una cartulina con su nombre en diamantina.


“Tonto,” Murmuró Minho con aprecio, apretando la correa de su mochila, para no hacer algo estúpido como tomar a Jisung de las mejillas y besarlo hasta el cansancio.


Jisung se percató de su presencia e inmediatamente se le iluminó el rostro, una enorme sonrisa y sus ojos casi desapareciendo mientras meneaba el letrero enérgicamente. Minho siguió riendo y se apresuró hacia él, deteniéndose al estar a solo unos pasos de él.


Parpadeó, sacudió la cabeza y parpadeó de nuevo.


Pero nada cambió.


“Tus dientes,” Minho sabía que debería de estar abrazando a Jisung en ese momento, debería de estar apretando a su mejor amigo y causando una escena que incomodara al resto de los viajeros, pero no pudo. Estaba demasiado impactado. “Están derechos.”

Jisung seguía sonriéndole emocionado, y Minho podía verlo, podía ver cuan feliz, confiado y orgulloso lucía. Sabía que tenía que decirle algo lindo, decirle lo hermoso que se veía, pero todo lo que salió de su boca fue, “¿Por qué?”


La sonrisa de Jisung flaqueó un poco, bajando la cartulina, colocando una mano sobre su boca, mientras Minho lo seguía observando sorprendido. Entre más lo observaba Minho, más incómodo parecía ponerse, hasta que su sonrisa se borró completamente de su rostro,


“Porque antes eran raros.”


Minho quería gritar que sus dientes no era raros, que eran encantadores y hermosos y enternecedores y tan Jisung que hasta era un poco perturbador verlo sin esa sonrisa. Minho se preguntó como es que no lo había notado antes en ninguna de las video llamadas, se preguntó cuanto tiempo había pasado desde la última vez que vio la sonrisa imperfecta de Jisung, cuándo había perdido aquello que amaba tanto sin darse cuenta.


Era obvio lo incómodo que se encontraba Jisung ahora y Minho podía sentir un vacío crecer entre ellos entre más se quedaba solo ahí observándolo, en lugar de tocarlo, en lugar de ofrecerle un cumplido. Podía ver el dolor en los ojos de Jisung, tenía que arreglarlo, tenía de destruirlo antes de que se apoderara de él.


“Te ves bastante lindo,” Las palabras de Minho estaban cargadas de sinceridad, porque realmente se veía hermoso, siempre se había visto así ante sus ojos y nada iba a cambiar eso. Minho sabía que no haría ningún bien en decirle que no tenía necesidad de arreglar nada, sabía que esos pensamientos eran egoístas, porque Jisung claramente lucía más feliz ahora.


Soltó su mochila y finalmente acortó la distancia entre ambos para atraer a Jisung hacia él, mientras éste dejó caer por completo la cartulina para abrazarlo también. Minho acarició la cabeza de Jisung, sus dedos enredándose en su cabello, suspiró percibiendo el olor a casa. El rostro de Jisung estaba presionado contra su cuello, Minho podía sentir su respiración entre cortada recorrer su piel. Pensó sentir lagrimas, y después sintió a Jisung temblar en sus brazos, y después unos suspiros escapando de su boca mientras Minho lo abrazaba con más fuerza. El sonido de dolor de Jisung atrajo lágrimas a sus propios ojos, y pronto comenzó a llorar también, envuelto en un abrazo que no quería dejar ir nunca.


Jisung comenzó a hablar, sus palabras tambaleantes saliendo de sus labios una y otra vez, casi inaudibles, pero Minho pudo sentirlas más que escucharlas.


“Te extraño, te extraño, te extraño…”



Después de aquella video llamada, Minho había asumido que Jisung iba a llevarlo directamente a su casa después de recogerlo del aeropuerto, para así poder quedarse dormidos juntos, como había querido.


Pero en lugar de eso fueron a cenar, apretujados en una mesa pequeña con Changbin y Seungmin. A pesar de que Minho adoraba a sus amigos hasta la muerte y estaba feliz de verlos, en ese momento lo único que quería era estar a solas con Jisung.


Al menos Jisung se encontraba compartiendo banca con él, apretado contra su lado mientras sumergía sus patatas fritas en su malteada de chocolate. Él y Changbin estaban hablando entusiasmadamente de la nueva canción que acababan de grabar, y Minho sabía que debería de estar escuchando, pero estaba demasiado distraído por la calidez del muslo de Jisung contra el suyo.


Ya tenían una hora sentados ahí cuando Jisung se paró para usar el baño, su enorme chaqueta deslizándose y dejando ver una parte de su hombro. La mezclilla cedió la vista a una hermosa piel dorada y a un brazo musculoso que no tenía nada que ver con lo que Minho estaba acostumbrado antes de irse. Jisung no pareció percatarse de esto mientras se dirigía al baño y el corazón de Minho volvió a descontrolarse, recordando al chico tímido que solía revolverse con solo pensar en utilizar una playera sin mangas, tan consiente de sí mismo que todo lo que usaba era dos tallas más grandes.


Seungmin siguió su mirada y sonrió, “ Ha estado ejercitándose.”


Minho asintió, desviando finalmente la mirada y regresando a su plato. Tomó su hamburguesa, “Jisung, um, cambió bastante.”


“Solo físicamente,” La voz de Seungmin era suave, y Minho supo que su amigo podía leer todo en su rostro. “Sigue siendo el mismo.”



Casi era la media noche cuando finalmente llegaron a la casa de Jisung, Minho sentía la pesadez en sus ojos a causa del viaje. Cuando entraron al cuarto de Jisung, Minho soltó su mochila en el piso e inmediatamente se tiró en la cama, sin molestarse en prender la luz, conocía ese cuarto casi tan bien como el suyo, así que solo le tomó segundos para desparramarse en la cama.


Jisung siguió detrás de él, cerrando la puerta y moviendo la mochila de Minho a un lado. Había suficiente luz proveniente de la luna, que podía verse desde la ventana, como para que Minho pudiera ver claramente que Jisung había comenzado a cambiarse.


Se quitó la chaqueta y Minho sintió que perdió el aliento, sabía que si Jisung volteara a verlo en ese momento y encontrara su mirada, vería en esta la añoranza y el deseo que había estado escondiendo todos esos años. No lo hizo, aventó la chaqueta hacia el closet y tomo la orilla de su camisa, levantándola hasta su cabeza.


Esta vez la sorpresa de Minho se hizo audible en un suspiro y la mirada de Jisung inmediatamente se encontró con la suya en la oscuridad tenue del cuarto. La vulnerabilidad que había visto en su última video llamada podía verse de nuevo en sus ojos, y Minho pudo sentir el nerviosismo de Jisung, pero éste se puso el pantalón de la pijama antes de ir hacia la cama, aun sin camisa.


Se detuvo unos pasos antes de llegar al borde de la cama, Minho se sentó lentamente, sus ojos en el rostro de Jisung. Había desesperación en ellos, y añoranza que Minho reconoció bastante bien, y supo en ese momento que había sido un estúpido todos esos años.

Jisung también lo amaba.


Fue éste quien habló primero, su mano colocándose en su definido estómago, “Lo hice por ti.”


Minho parpadeó confundido, observando el rostro de la única persona que había querido jamás, “¿Hiciste qué por mi?”


“Esto,” Jisung dio unas palmadas a su estómago, y después se envolvió a si mismo con sus brazos, apretando sus bíceps. “Pensé que así tal vez, me verías finalmente.”


“Siempre te he visto Jisung,” Las palabras de Minho eran más un suspiro que otra cosa, pero sabía que Jisung las había escuchado. No era una confesión apropiada, pero era suficiente, y Jisung se encontraba entre sus brazos tan pronto lo dijo.


Ambos cayeron hacia atrás, recostados por completo en la cama, y el mundo de Minho dejó de girar tan pronto como sintió otros labios en los suyos, suaves y tentativos, llenos de tanto sentimiento que Minho casi sintió romperse ¿Cómo no se había dado cuenta? ¿Cómo había pasado todo este tiempo pensando que él era el único con éste sentimiento?


Minho dejó que sus manos acariciaran gentilmente la espalda de Jisung, maravillándose ante el efecto que sus movimientos tenían en la respiración del otro contra su boca.


Continuaron besándose por unos minutos más, hasta que Jisung retiró su rostro. Sus pupilas imposiblemente grandes, y sus labios tan rojos como sus mejillas, y se veía tan hermoso que Minho casi lloró.


“Te amo,” Sus palabras albergaban tanta sinceridad que terminó por escapársele una lágrima, Minho sostenía de las caderas a Jisung, mientras éste recorría la trayectoria de la lágrima con ojos llenos de asombro.


“También te amo,” La respiración de Minho se entrecortó mientras Jisung limpiaba tersamente sus lagrimas, para después llenar de pequeños besos los lugares que habían recorrido.


“Te he amado desde siempre, no tenías que cambiar por mi.”


Jisung se quito de encima para acomodarse al lado de él, colocando su cabeza en su pecho, mientras el brazo de Minho le rodeaba por la cintura, “Quería tener más confianza en mi mismo, para tener el coraje de decirte la verdad. Después pensé que tal vez, si me veía lo suficientemente bien, te olvidarías de que me has visto siempre solamente como amigo.”


“Siempre me has parecido hermoso,” Minho hizo pequeños círculos con su pulgar en la cadera de Jisung, disfrutando los escalofríos que provocaba, “Pero estoy orgulloso de lo lejos que has llegado, de tu confianza. Mereces brillar, Jisung.”


Los dedos de Jisung jugaban con la orilla de la camiseta de Minho, antes de escabullirse debajo y extenderlos sobre su piel, “He soñado con éste momento por años, pero nunca pensé que pasaría realmente.”


“Está pasando,” Minho tampoco podía creerlo. “Te amo y tú me amas, y tenemos todo el fin de semana para aprovechar tantos besos como podamos.”


Había algo de tristeza en la risa de Jisung, “Y después regresarás a la academia.”


“Y después regresaré a la academia,” Su voz era gentil y sus manos reconfortantes en la cadera de Jisung. “Pero regresaré. Voy a regresar en unos meses, en verano, y podremos pasar todo ese tiempo incomodando a Bin y Seungmin con nuestro amor.”


La risa de Jisung era más genuina esta vez, acurrucándose más en el pecho de Minho, su cabello provocando cosquillas en su nariz, “No puedo esperar.”


“Yo tampoco,” Murmuró Minho, sus labios rozando el cabello de Jisung mientras se le cerraban los ojos. Estaba Exhausto, pero esperó a que Jisung se quedara dormido antes de sucumbir al sueño él mismo, sus brazos rodeando con protección al chico que amaba.



Nota del Traductor: Las historias de esta chica son TAN LINDAS, pronto subiré más de sus hitoria.

Entradas recientes

Ver todo

Comentarios


¡RECIBE NOTICIAS!

© 2023 by Lovely Little Things. Proudly created with Wix.com

bottom of page